¿Qué diferencia hay entre un AGV y un AMR?
Flexibilidad y adaptabilidad
Los vehículos de guiado automático (AGV) son una solución fiable y consolidada para el transporte automatizado de materiales en diversos entornos industriales. Están predestinados a ofrecer un rendimiento de transporte continuo y predecible y una alta disponibilidad. Y son especialmente eficaces en entornos con áreas de ruta claramente definidas y flujos de trabajo estables y recurrentes.
En función de la tarea y las condiciones espaciales, se utilizan distintas tecnologías de navegación. Además, los AGV pueden transportar diferentes cargas, desde simples contenedores o cajas de cartón hasta palets y portacargas especiales, y son conocidos por su alta fiabilidad y seguridad.
En cambio, los robots móviles autónomos (AMR) ofrecen mayor flexibilidad y adaptabilidad en entornos de trabajo cambiantes y están predestinados a entornos no estructurados. Son capaces de detectar y evitar obstáculos de forma dinámica, lo que los hace ideales para aplicaciones que requieren una gran variabilidad y una rápida adaptación.
Navegación
En principio, los vehículos de guiado automático siguen rutas predefinidas en una zona determinada. A menudo se localizan a sí mismos mediante sistemas de guía instalados permanentemente, como bandas magnéticas, marcas en el suelo o reflectores. Como siguen rutas fijas (ópticas o virtuales), son precisos y fáciles de predecir. Si hay obstáculos en su camino, se detienen y lo señalan a su entorno. En cambio, los robots móviles autónomos utilizan sensores avanzados y algoritmos de inteligencia artificial para orientarse en su entorno. Navegan por zonas y calculan la ruta en tiempo real basándose en el entorno actual. Por tanto, también pueden reconocer y evitar obstáculos de forma dinámica.
Ambas tecnologías tienen sus ventajas y son adecuadas en función de las necesidades y circunstancias específicas del cliente. Por este motivo, el especialista austriaco en robótica móvil DS AUTOMOTION, una empresa del Grupo SSI SCHAEFER, ha combinado las ventajas de ambos mundos y las ha establecido bajo el término «autonomía planificable».
Esto permite ofrecer soluciones personalizadas para diversos sectores: